Una vez que tengamos montada toda nuestra oficina no queda otra que empezar a darse a conocer y conseguir los máximos clientes posibles. De esta manera, conseguiremos que nuestros beneficios aumenten poco a poco, que es básicamente los objetivos de cualquier empresa o negocio que se precie.

Sin embargo, hay que tener en cuenta ciertos factores para que nuestro despacho u oficina sea el lugar más adecuado cuando nos visite un cliente. Tenemos que conseguir que este se sienta completamente cómodo a la hora de cerrar un acuerdo y para ello cualquier detalle es más que importante.

¿Y tú? ¿Te gustaría saber cómo influye disponer de un buen mobiliario de oficina a la hora de tratar con un cliente potencial? Pues si estás interesado, a través del siguiente artículo te lo contamos con todo lujo de detalles:

La primera impresión lo es todo

¿Acabas de montar tu oficina con el mejor mobiliario de oficina y con un diseño de lo más vanguardista pero por otro lado todo está un poco desordenado? Pues te damos la enhorabuena por lo primero. Conseguir que el escritorio, silla y armario de oficina pegue bien con los demás elementos de tu despacho a veces no es tarea fácil.

De todas formas, si toda tu oficina está completamente “manga por hombro” sin orden alguno, ya es hora que te pongas a ordenarla lo antes posible. Imagina por un instante que cualquier cliente te visita por sorpresa y se da cuenta de todo el desorden que impera en tu oficina.

Ya le habrás creado una primera “mala impresión que a lo mejor después es posible de arreglar ofreciéndole un buen producto o servicio. Sin embargo, a veces revertir esta primera imagen es a veces irreversible o muy difícil de cambiar.

Por esta razón, te recomendamos que impere un poco el orden y el sentido común en tu oficina. Los escritorios deben estar siempre alineados y colocados en el mismo lugar. Debe ocurrir lo mismo con la sillas, que deben estar siempre por la zona de las mesas y colocadas en el hueco de las mismas si nadie las está usando. Esto apenas lleva tiempo hacerlo y te le dará un ambiente mucho más serio a la oficina

 

Gracias a un buen escritorio se pueden cerrar grandes acuerdos

Ya os lo hemos contado muchas veces. El escritorio no debe usarse exclusivamente para apoyar tu ordenador y los documentos que uses durante el día a día. También debe ser un elemento para interactuar mejor con los clientes.

Si tu escritorio  es lo suficiente bueno y amplio, este también te puede ayudarte a que tu cliente se sienta mucho más cómodo en tu despacho. Si este se lo encuentra simplemente ordenado, limpio de papeles u otros enseres personales, seguro que la interacción con el mismo será mucho más sencilla y directa.

Con todos estos factores, seguro que tu cliente quedará muy satisfecho por el trato recibido, al menos durante la primera cita, que suele ser una de las más influyentes a la hora de cerrar un acuerdo.

Una vez que consigas todo esto, ya puedes dedicarte a otros factores como la comunicación verbal y no verbal para que así las posibilidades de obtener un cliente aumenten exponencialmente. Pero como te hemos dicho, debes reflectar una imagen de seriedad a través de un mobiliario ordenado y apenas recargado.

 

Haz que el cliente se sienta cómodo en las sillas de oficina

Aunque la imagen es uno de los factores más importantes, tampoco lo es todo. También tienes que conseguir que el cliente se sienta completamente cómodo mientras esté en tu oficina. ¿Y cómo conseguirlo? Pues aparte de las mesas, también lo puedes conseguir a través de una buena silla de despacho.

En primer lugar, tienes que prestar atención a que la silla que le ofrezcas sea igual o incluso más cómoda de las que tienes esparcidas por toda la oficina. De nada sirve que tú tengas una silla acolchada para desarrollar tu actividad laboral de manera óptima, si después a tu cliente le ofreces la típica silla endeble y de plástico.

Recuerda que una persona interesada en tu producto o servicio vale su auténtico “peso en oro”. Tienes que hacer lo posible para que esta persona se fije en ti. Y hasta el más mínimo detalle puede inclinar la balanza a tu favor. Para ello, solo tienes que conseguir que se sienta mínimamente importante y especial. Seguro que después lo agradecerás.

Los armarios y cajoneras te pueden servir como despensa improvisada

Son muchas las ocasiones en las que tendrás que sesiones más largas de lo normal con cualquier cliente. Estos quieren que les expongas con todo lujo de detalles las condiciones de tu negocio y empresa antes de  cerrar cualquier tipo de acuerdo (esto es algo completamente normal). Ante esto, lo que mejor es que preveas esta situación y dejes cualquier refrigerio o snack guardado para tu cliente.

De esta forma, conseguirás dos cosas. Primero que la reunión sea mucho más amena por que el mero hecho de recibir algo para comer puede ayudar a ambas partes a recuperar un poco de energías. Por otro lado, también generarás una imagen mucho más cercana y de profesionalidad. Tu cliente sentirá que te estás preocupando de verdad por él y que te interesa su bienestar, tanto si llegáis a un acuerdo como si no.

Tan solo tienes que adaptar tus cajoneras o armarios de oficina para que se puedan almacenar bebidas o pequeños entremeses por si la ocasión los requiriese. Incluso hay pequeñas neveras y armarios que se pueden instalar sin que llamen mucho la atención por la oficina. Y seguro que te quitarán de algún aprieto cuando recibas la visita de cualquier cliente inesperado.. ¿A que son todo ventajas?